Tenía los raíles de los cajones rotos, era de un color horrible, y la madera estaba picada por mil sitios, según alguien muy cercano a mí, era como "recién cogida de la basura"... pero tenía algo que me enamoro. Tenía una curva en las patas súper bonita y barriga en los cajones, era una cómoda muy antigua… Que lo único que necesitaba era que la lavaran la cara y la pusieran bonita.
Pasó tres años en el desván de mi hermana (yo no tengo sitio en mi casita) hasta que decidí que hacer con ella... Pues bueno, me quedé embarazada, y teníamos que montarle la habitación al duendecillo que venía de camino.... y que mejor forma de utilizarla que para guardar los bodys, peleles y ropita de mi duende... así que me puse manos a la obra, también pedí prestadas las manos de mi papi porque con el barrigón que gastaba ya.. No podía hacer muchas cosas. Y bueno este es el resultado…
Este es el detalle de las patas que tanto me gusta...
Y así quedaron los cajones por dentro...
Me encanta!! Yo también me hubiera enamorado de ella. Te he quedado genial.
ResponderEliminar